domingo, 15 de febrero de 2009

Otro camino. Trofeo Marathon de campo a través

Yo intentaré buscar otro camino y olvidar que ayer corría por asfalto, hoy no sé porqué estoy todo embarrado, no lo quiero ver.
 
Hoy hemos ido al Trofeo Marathon de campo a través. Íbamos Pablo, Max, Irene y yo. Recogí a Pablo en el metro de Aluche a las 8:50 y nos fuimos a un lateral del parque a dejar el coche. Llamamos a Max y quedamos en la zona donde daban los dorsales, pero como no llegaba y se nos echaba el tiempo encima volvimos al coche a dejar lo que no íbamos a utilizar. Por fin volvimos y nos encontramos con Max e Irene, pero todavía tenían que dejar la bolsa con la ropa que no iban a usar en el ropero, así que allí fueron mientras Pablo y yo nos metíamos en la zona de la salida. De repente, mientras ellos todavía estaban dejando la ropa ¡PUM!, sonó un disparo, ¡TODOS AL SUELO!, un golpe de estado... ¡ah!, no la salida y Max e Irene sin venir.
 
Con mucha calma, mirando hacia atrás a ver si aparecían fui trotando hasta la línea de salida, donde me coloqué la música y comencé a correr. Lo bueno de salir tan atrás es que adelantas a mucha gente, lo malo es que te cuesta mucho hacerlo.
 
El recorrido era una vuelta a un circuito corto de 1.500 m y dos al circuito de 2.575 m, haciendo un total de 6,79 km. Al principio me situé delante de Pablo, pero enseguida me adelantó y fue haciéndose hueco entre la gente para poder encontrar su ritmo. Yo hice lo mismo y a menos de 100 metros lo iba viendo, pero poco a poco fue abriendo hueco entre nosotros aunque en largas rectas o en algunas curvas podía verlo todavía. Yo iba a un ritmo bastante alto y en la segunda vuelta (la primera larga) me encontré cansado, pero intenté no descender la velocidad y lo conseguí. Al empezar la tercera vuelta llevaba 18 minutos y pico, en 4.075 m, a un ritmo de 4:32 min/km. En ese tramo vi a Manolo, un conocido, amigo de mis padres y mis tíos y me propuse alcanzarle. Me costó mucho y hubo un momento que se me distanció y pensé que no podría cogerle, pero ya acabando la carrera llegué a su altura y le rebasé. En la recta de meta hubo un chico, que hizo lo que hago yo en otras carreras, sprintar para recortar puestos y tiempo, me adelantó poco antes de llegar a la línea de meta en la que me tomé un tiempo de 30:50, a 4:33 min/km, con una media de 179 pulsaciones y una máxima indeterminada, ya que algo interfirió en el pulsómetro y me marcó 222 de máxima. Pablo hizo 29:15 más o menos, así que apenas me sacó 400 m. Irene y Max entraron detrás nuestro, pero no se tomaron el tiempo porque empezaron cuando ya el resto llevábamos un tramo recorrido y casi no les dio tiempo ni a empezar. Rectifico, Max hizo 35:16.
 
Una vez rebasada la línea de meta nos dieron una camiseta (que les sobró de otras carreras, a mí me tocó de la XXV Media Maratón de Villaverde 2008, a otros de la Melonera), un trofeo recordatorio de cristal tallado (también de excedentes de la Media Maratón), platanos, naranjas, aquarius, fanta limón, chocolatinas, vitaminas, suplementos de glucosa y revistas. Un buen regalo dada la gratuidad de la carrera (aunque sean de sobras de otras carreras se agradece) y una buena organización aunque faltaba un crono en la línea de llegada.
 
El recorrido era por el parque de las Cruces (no tengo plano, pero si lo encuentro lo pondré) por caminos de tierra y por medio de la hierba, entre árboles, cruzando puentes de arroyos y caminos de asfalto cubiertos por alfombra para amortiguar la pisada y el cambio de terreno.
 
La música esta vez no me acompañó porque me fallaron algunas canciones y no pude disfrutar de la carrera con la música como otras veces. Lo solucionaré para la próxima cita que será el día 1 de Marzo en el cross de la U.A. Coslada.