Como era previsible no he podido con toda la Línea 7 y he tenido que reducirla al término municipal del Madrid, sin pasar al Metro Este. Mal empezó el día e iba a ser augurio de que no se iba a cumplir la etapa del reto. Apenas dormí y lo que dormí no descansé nada. Me levanté a las 6:30 (una hora después de lo que pensaba) y me equipé con mi minimochila, una botella de agua llena de aquarius del Mercadona, el mp3, el móvil y el pase de metro para ir hasta Pitis. A la mochila llevaba enganchada una bandera de España que ha ido ondeando por todo Madrid.
Para empezar al llegar a Estadio Olímpico, donde hay que hacer cambio de tren para ir a Madrid me olvidé la botella en un asiento (hala, a pasar sed). Salí de Pitis y vaya sorpresa que allí todavía no habían puesto las calles, me extrañó porque ya eran las 8, no era tan temprano, así que llegué a la conclusión que no las tenían puestas porque no esta en el presupuesto del Ayuntamiento… Pues por descampado a medio asfaltar empecé a moverme por el pueblo de Fuencarral callejeando y eliminando estaciones, cruzando la M-30 y de pronto en Antonio Machado que no tenía bien explicado el recorrido ni imagen del mapa y me perdí (no mucho, porque volví a un punto por donde ya había pasado, hasta que encontré mi camino pasó un buen rato y un par de kilómetros), después más perdido que un pulpo en un garaje y preguntando a todo el mundo que veía por la calle (un domingo a esas horas sólo había ancianos) conseguí salir de aquel laberinto y llegar a Francos Rodríguez.
Una vez allí y sabiendo donde me encontraba continué mi camino por Pablo Iglesias y su gran cuesta del acueducto para llegar a Reina Victoria y Guzmán el Bueno hasta Cea Bermúdez, la cual con su continuación me llevó a María de Molina y Av. América, donde a la altura de Cartagena doblé hacia el sur y de nuevo al este para cruzar la M-30 (otra vez) por una nueva pasarela que me dejó en un lateral de la mezquita. Por el Barrio de la Concepción tuve que parar en unos frutos secos a comprarme dos botellas de agua ya que iba a deshidratarme, y mientras me bebía una me tomé un pequeño descanso apoyado contra una pared.
Repuestos los líquidos continué para salir a la calle Alcalá y pasar a la zona de Pueblo Nuevo y San Blas (donde están en fiestas en el parque) y allí me empecé a encontrar sin fuerzas para continuar, tanto que hice otra parada a rellenar mi botella en una fuente y a estirar. Con más corazón que cabeza quería acabar los 10 km que me quedaban del reto, pero al poco de retomar la carrera los gemelos se empezaron a cargar y pensé que mejor una retirada a tiempo que una derrota por lesión y en Estadio Olímpico abandoné mi Línea 7.
El recorrido ha sido muy variopinto con grandes tramos llanos y pronunciadas subidas y bajadas sobretodo por la zona de Valdezarza y Francos Rodríguez. El calor comenzaba a aumentar, empezando con 22 ºC, luego 24ºC y al poco los termómetros debían alcanzar casi los 30ºC.
He pasado por sitios tan emblemáticos como los antiguos poblados chabolistas de Pitis, el Barrio del Pilar y la M-30, la Audiencia Provincial de Madrid, el barrio de Tetuán, la Jefatura de la Policía, la Dirección General de la Guardia Civil, Cea Bermúdez, Castellana, María de Molina y Avenida América, la Mezquita de la M-30, el Barrio de la Concepción, Pueblo Nuevo, San Blas con sus yonkis y gitanos y finalmente el Estadio Olímpico de Madrid, La Peineta.
Debido a no haber podido continuar hoy con toda la Línea 7, he tomado la determinación de recorrer las Líneas de Metro únicamente por el término municipal de Madrid, salvo la 12, que posiblemente la haga en bicicleta o la reduzca a un tramo de la misma.
